¿Te has permitido observar qué es todo lo que te dices antes de creértelo? ¿Te has preguntado de dónde proviene aquello que te dices? ¿Quién es la voz en tu cabeza que te critica, te castiga y te rechaza constantemente? ¿De verdad eres imperfecto y hay algo malo en ti de lo que tienes que desconfiar o te hicieron creer que lo eres?
No eres las voces en tu cabeza. Cada pensamiento doloroso, cada critica, cada juicio, cada rechazo, proviene de una voz que aprendiste a escuchar pero que no eres tú. Escúchala pero no creas todo lo que te dice, más bien cuestiónala y ponle un signo de interrogación (?)